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Leer el partido, un factor limitante que nos transformar en reactivos. La capacidad de interpretar e intuir nos transforma en proactivos y nos da la posibilidad de escribir el partido.

¡El fútbol es como la vida, una evolución continua!

Tengo claro que hasta que no nos demos cuenta de esto el fútbol no evolucionará y será un factor limitante para el crecimiento y desarrollo de los jóvenes futbolistas.

¡Aquellos, que pueden cambiar y escribir el futuro!

Seguramente por este motivo se debería hacer una reflexión muy profunda de todo lo que está pasando y tener la humildad necesaria para ver que lo que era válido e hizo ganar tanto en el pasado a día de hoy ya no es eficiente.

Aún estamos a tiempo y sin lugar a dudas un cambio de paradigma en la educación y formación de los más jóvenes nos puede ayudar a proyectar un futuro apasionante para anticiparnos a todo lo que puede ocurrir y tener la capacidad de escribir y diseñar el mejor futuro a través de las relaciones y la creatividad de las personas que formamos este apasionado juego, el fútbol.

El fútbol lo forman personas por lo cual el fútbol son emociones y relaciones. Bajo mi humilde punto de vista el fútbol debería cambiar en esta dirección, es por esto, que cada día me hago muchas preguntas ya que veo que el fútbol va en una dirección y la formación en otra totalmente diferente.

Es por este motivo que una y otra vez me pido:

  • ¿Por qué entrenar en modo analítico?
  • ¿Por qué entrenar la preparación física alejada del juego?
  • ¿Por qué acelerar el proceso de maduración de los jugadores y jugadoras?
  • ¿Por qué trabajar las realidades o ideales de los entrenadores?
  • ¿Por qué trabajar la direccionalidad del fútbol en solo dos sentidos (defender la portería/atacar la portería)?
  • ¿Por qué intensidad entendida como correr más que el rival o ser más fuertes o agresivos?
  • ¿Por qué no implicar a las familias en el proceso enseñanza/aprendizaje?
  • ¿Por qué no trabajar a partir de los puntos fuertes de los jugadores y jugadoras?
  • ¿Por qué no trabajar en la misma línea metodológica en el fútbol formativo y el primer equipo?
  • ¿Verdaderamente los datos son tan útiles o limitan la formación del jugador?

Estas y tantas otras preguntas son las que me hago a diario porque sinceramente creo que lograr el cambio para una educación y formación mejor aún es posible. No solo en el fútbol formativo sino también en el fútbol profesional.

Lo que para muchos puede ser casualidad o azar para mi es causalidad ya sea en un modo positivo o en un modo negativo.

Me hago todas estas preguntas ya que veo que el fútbol, la sociedad y la vida van en otra dirección totalmente diferente.

Como he dicho anteriormente el juego lo forman personas y debemos formar y educar a partir de las emociones y a través de los valores para que los jugadores sean capaces de identificarlas, aceptarlas y gestionarlas positivamente para que nos ayuden a transformarnos positivamente y faciliten las relaciones entre iguales, entorno, juego…

Por esto, no sería mejor entrenar aspectos como, por ejemplo:

  • La motivación: no la motivación extrínseca, sino la motivación intrínseca aquella que te mueve verdaderamente, la que nace en el corazón de las personas para ayudar a los jugadores a generar la capacidad de automotivarse y encontrar el sentido a lo que hacen.

Sin lugar a duda, usar herramientas como, por ejemplo, las dinámicas proactivas, aquellas dinámicas que nos permiten y ayudan al jugador/persona a formar parte activa del proceso y sentirse participes aumentado así la motivación y sentimiento de pertinencia hacia lo que se está haciendo.

Una buena iniciativa, sin lugar a dudas, podría ser la de hacer partícipes a los jugadores/as a la hora de definir objetivos, metas. Esto, a parte, de aumentar la motivación e involucrar el jugador en el proceso, nos permitiría entrenar a partir de la realidad y los intereses de cada individuo.

Otra dinámica, podría ser la de definir conjuntamente normas y posibles sanciones ya que es muy importante que el jugador se vea involucrado en dicho proceso y gestión ya que esto hará que se vean las normas y sanciones como algo positivo, algo, que nos acerca a lograr los objetivos y a conseguir las metas establecidas conjuntamente y no como algo negativo que nos quita libertad a la hora de actuar.

Las normas y sanciones deben ser vistas e interpretadas como algo que aumenta la libertad y la responsabilidad ya que nos ayudaran a lograr todo lo que nos propongamos.

Trabajar en esta línea nos ayudará a transformar positivamente el proceso enseñanza/aprendizaje y el contexto en un entorno facilitador y multiplicador de oportunidades lo cual contribuirá positivamente en la transformación de la persona en el camino hacia la excelencia.

  • La intensidad: no podemos seguir pensando que la intensidad es solo correr más que el rival o hacer algo a niveles de energía muy elevados, no podemos quedarnos solo con esto porque esto nos limitara y nos transformara en mediocres. El deporte, en este caso el fútbol, está en evolución continua y en estudio continuo y el aspecto cognitivo/mental/emotivo de cada vez son más importantes y determinantes. Por este motivo, debemos ir más allá y entender la intensidad como la capacidad de mejorar la atención y concentración durante el juego, tener la capacidad de focalizar la atención para mantener una concentración alta, esto seguramente hará que las decisiones que tomemos sean más acertadas y podremos hablar de una intensidad cualitativa alta que nos hace ser mejores en la toma de decisiones y relaciones.

La experiencia me ha enseñado y me ha hecho ver que muchos entrenadores focalizan su atención en los espacios cercanos al balón cosa que bajo mi opinión limita totalmente la formación y crecimiento de la persona/jugador, así como la toma de decisiones.

En el fútbol podemos hablar de espacios socioafectivos, como, por ejemplo, intervención, ayuda mutua y cooperación. Lo que seguramente marcará la diferencia será la capacidad del entrenador de entrenar todos estos espacios socioafectivos de manera óptima y no solo focalizarse en el espacio de intervención ya que los espacios de ayuda mutua y cooperación son claves tanto en el MCB como MSB.

Tener la capacidad de generar y crear juegos para que los jugadores sean capaces de mantener una atención y concentración alta en dichos espacios socioafectivos marcara la diferencia.

  • Nivel de activación optimo: dar las herramientas necesarias a los jugadores/as para que puedan descubrir a través del juego su nivel de activación optimo, aquel que les permita rendir y jugar en su mejor nivel.

Ya sea en el MCB como en el MSB ya que cada uno es diferente y su nivel de activación será diferente en función de cada fase del juego incluso me atrevería a decir que el nivel de activación optimo también depende directamente con el compañero o compañeres con los cuales te encuentras dentro un espacio socioafectivo por lo cual trabajar a partir de la variabilidad, realidad y complejidad del juego y del individuo será calve para ayudar al jugador a encontrar su nivel de activación optimo en función a cada fase del juego.

El entrenador no define el nivel de activación ya que cada persona tiene el suyo, pero si puede generar y provocar las situaciones de entrenamiento adecuadas para que el jugador/a sea capaz de encontrarlo y modificarlo en función a las necesidades.

  • Emociones: como he dicho anteriormente aspecto clave ya que como personas nos movemos por emociones, por estados de ánimo y las decisiones que tomamos vienen dadas por las emociones vividas en diferentes situaciones, no hay ninguna situación igual a otra, pero si las hay similares y actuamos a través de automatismos creados a partir de lo que hemos sentidos en diferentes situaciones. Por esto, será clave que generemos situaciones en las cuales, los jugadores/as sean capaces de reconocer /identificar las emociones para poderlas gestionar positivamente ya que estas emociones posteriormente se transforman en sentimientos los cuales son más estables y determinantes lo cual determinara la forma de ser de una persona ante diferentes situaciones.

Será clave entrenar a partir de la complejidad de la persona y del juego no podemos trabajar todo esto de manera analítica ya que el para lograr esto todas las dimensiones que forman se deben de interrelacionar al igual que todos los elementos que formar el fútbol.

Generar los entornos de entrenamiento adecuados a partir de la complejidad nos transformará en facilitadores de aprendizaje, lo cual permitirá acompañar a la persona hacia una transformación positiva.

Entrenar todos estos aspectos y hacerlo en esta línea metodológica nos da pie, sin lugar a duda, a mejorar entre otras cosas, por ejemplo:

  • La autorregulación: ya que permite al individuo descubrirse y conocerse mejor y esto le ayudara, por ejemplo, a gestionar mejor el error. Por ejemplo, durante un partido si hago un fallo no focalizar la atención en el error durante demasiado tiempo ya que esto hará bajar la prestación y rendimiento del jugador/a.

Podríamos hablar mucho de todo esto, pero en definitiva diría que nos permite gestionar los impulsos para que estos no afecten negativamente al rendimiento.

  • La personalidad: ayudar a jugador/persona a estructurar su personalidad, bajo mi punto de vista en el fútbol formativo la personalidad es una cosa que está en construcción y debemos dar las herramientas necesarias a todos los jugadores/as para ayudarles a estructurar su personalidad a través de las experiencias que nos permite vivir el fútbol.
  • Autoconfianza: a través de este proceso creo que se trabaja positivamente la autoconfianza, que será clave ya que haber una buena autoconfianza permitirá seguir entrenando y ser capaces de afrontar cualquier situación en un modo positivo.

Soy un fan de esta metodología ya que esto nos permite llegar al corazón de los jugadores/personas y darles lo mejor de nosotros para acompañarlos durante el camino hacía la excelencia a través de una educación/formación de calidad a partir de sus capacidades y necesidades.

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